Ha sucedido... lo que temí toda la vida... me he transformado en un subproducto pop... nooooo.
Fue tan repentino, no pude hacer nada por impedirlo. De un día para otro me encontré moviendo las caderas al son del reggaetón en un carrete, cual perrito cachondo!. De un día para otro me sabía la letra de la locura automática. De un día para otro mis aros comenzaron a combinar con mis zapatillas. De un día para otro conocía el café de starbucks (y no es porque una amiga trabaje ahí!). De un día para otro pude diferenciar a hillary duff de avril lavine y ashlee simpson. De un día para otro conocía toda la saga de lost (y amaba a sawyer). De un día para otro don omar dejó de ser daddy yankee con otro nombre... Sí, de un día para otro. De haber sido más paulatino, definitivamente habría detenido esta vergüenza.
Pero la gente no muta así como así no más. Es hora de confesarlo... cuando tenía la tierna edad de 12... era fanática (sí, FANÁTICA) de las spice girls. Vergonzosamente fanática, de esas que sicopatean empapelando el dormitorio con fotos. Me sabía todas las coreografías y, obviamente las profundísimas e inspiradoras letras de las canciones. Es tan íntimo esto que les escribo, que ahora mismo me he ruborizado! (qué extraño!). Y he ahí la etiología de mi gravísima enfermedad (uff, ñoña), que he llamado "popitis" (¿?). Todo es culpa de ellas!!!... estas inglesas vestidas como bataclanas...
El punto es que mi vida era normal, hasta que a alguien se le ocurrió sugerir que para una fiesta de disfraces, YO fuera "la colorina" (Geri, para los losers que no las conocen, o los infantes que no recuerdan). Creen que es porque tengo el pelo rojo?, creen que es porque hablo un poco de inglés?, creen que es porque canto un poco?. No, según esta persona, TENGO TODA LA ACTITUD DE LA COLORINA!!!. Atroz. Qué es eso?. Hasta ese punto era una persona normal... ahora... no sé, tengo una especie de compulsión por andar gritando por los pasillos y vestirme como inquilina del barrio rojo de amsterdam con unas plataformas gigantes. Ahora no puedo pasar más de una hora sin cantar, aunque mi voz parezca la de un travesti. Tantos años reprimiendo esos recuerdos se fueron al tacho de la basura!... de la basura que se recicla, porque reaparecieron!. Y lo que es peor: volvieron a mi mente TODAS las letras y coreografías posibles... no sólo spice; afírmense britney y cristina!... en realidad eso no es lo peor, lo peor es que en cualquier momento las haré en público, esperando la aclamación popular... nooooo!.
En fin, trataré de revertir y volver a mi estado basal... a este paso, dudo que lo logre; si para qué estamos con cosas raras... es tan rico sentir la necesidad de pensar en nada. Tal vez ése era el efecto que producía mekano, que para mi mala suerte va a terminar.
Ven?, alguien tiene que ayudarme antes de que siga escribiendo estupideces... o estupideces más estúpidas que las de antes. Mejor me voy a practicar mis pasos para la próxima fiesta... |